Llevaba tiempo sin leer el Green Lantern de Jeremy Adams y Xermánico, una de las series en curso que más estoy disfrutando. Pero esta pausa en mi ritmo de lectura ha sido por una buena razón: he estado esperando a que terminara el mini-arco tie-in de Absolute Power para leerlo de una única sentada, y así tener una mejor perspectiva en conjunto con el evento. A continuación, comparto mis impresiones sobre estos cómics.
Puntuación: 7/10
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En primer lugar, hay que tener en cuenta que nos encontramos ante un pequeño corte en el ritmo habitual de esta etapa de Linterna Verde, ya que en estos últimos meses el Universo DC se ha visto embarcado en el evento llamado Absolute Power. Y tras el final de ciclo argumental que supuso el Green Lantern #12 (reseña aquí) era lógico que los meses siguientes se centrarían únicamente en ser número tie-in del mencionado evento, de forma muy similar a lo que ha ocurrido también en la actual etapa de Superman con Joshua Williamson y Jamal Campbell. La cuestión es: ¿funcionan estos tres últimos números de Linterna Verde como continuación de la etapa?
Pues en primera instancia yo diría que no. Quiero decir, estos cómics están claramente creados para complementar a la miniserie troncal de Mark Waid y Dan Mora; en ningún caso para continuar con lo narrado en anteriores números de Green Lantern. Por tanto, su lectura no tiene mucho sentido si no te lees al menos dicha miniserie para enterarte de lo que aquí se nos cuenta. Y es cierto que aquí hay cambios importantes en algunos personajes de la franquicia que seguro serán relevantes de cara al futuro de la serie, pero son cambios que no tienen ningún sentido sin saber de qué va Absolute Power en general. Eso para mi resta puntos a estos números, pese a haber sido bastante disfrutables en general, porque no veo normal que tengas que leerte obligatoriamente una historia ajena cuando en otras series como Titans esto se evitó sin problemas.
Otro de los problemas que agravan esto que os acabo de hablar es el hecho de que Jeremy Adams en estos números no deja de remitirnos a otros tie-ins del evento. Algo que lo único que consigue es abrir tramas y mostrar ciertas situaciones que jamás llegan a profundizarse, puesto que cualquier cosa que se nos muestra es rápidamente puesta en segunda plano con un cuadro de texto indicándote en que otro cómic puedes seguir dicha historia. Para mí, esto ha sido lo peor de estos tres números.En cambio, algo de lo que sí que he disfrutado muchísimo ha sido con el dibujo de Fernando Pasarín, el artista encargado de relevar a Xermánico durante los últimos meses. Y esto es algo que me ha sorprendido de sobremanera, teniendo en cuenta que este tipo de tie-in se suelen relegar a dibujantes más de tercera, pero está claro que DC en este caso ha optado por dejarse de tonterías y tener un buen artista al cargo. Algo que desde aquí aplaudo; Pasarín me ha parecido una pasada de dibujante, uno que espero que se mantenga para próximos proyectos en el Universo DC. Ha demostrado que lo vale.
Dentro de lo que cabe, me lo he pasado bastante bien leyendo estos últimos números del Linterna Verde de Jeremy Adams. Soy muy consciente de que son cómics que tienen problemas, por supuesto, pero sería injusto culpar a esta etapa por ello; al fin y al cabo, lo de ser un tie-in es por mandato editorial, no por decisión del guionista. Teniendo eso en cuenta, son cómics bastante decentes. ¿El problema? Que solamente son disfrutables si te los lees junto a la miniserie troncal de Absolute Power.
Puntuación: 7/10
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