Esta semana se ha puesto a la venta el primer número de Absolute Batman, de Scott Snyder y Nick Dragotta, la serie que estrena la línea Absolute dentro de la nueva iniciativa de DC All-In. Un primer número que me ha gustado mucho más de lo que me esperaba, pese a mis moderadas expectativas iniciales. A continuación, comparto mis impresiones sobre este cómic.
Puntuación: 8.5/10
Sin la mansión...sin el dinero...sin el mayordomo...¡lo que queda es el Caballero Oscuro Absoluto!
Con Absolute Batman me pasa una cosa muy similar a lo que me pasó con Ultimate Spider-Man (2024) y es que yo nunca he sido demasiado fan del personaje. Sí, he visto algunas películas suyas, he leído varios de sus cómics e incluso me he visto entera Gotham, esa serie de televisión que narra sus orígenes, pero nunca me ha llamado demasiado la atención como personaje. Por eso mismo, en realidad no tenía demasiado interés en este nuevo Batman absoluto. Iba con expectativas bastante moderadas; después de todo, poco me importaba si la cagaban con este nuevo comienzo. Por eso mismo me ha sorprendido tanto encontrarme con un primer número tan bueno, tan intenso y tan reseñable como este Absolute Batman #1. Un cómic que me ha flipado a muchos niveles, que me ha sorprendido muy para bien y que de entrada os puedo recomendar incluso si no os atrae particularmente este superhéroe.
De entrada, lo primero que me ha encantado de este cómic es su apartado visual, algo que no debería sorprender a nadie cuando es Nick Dragotta el encargado de dibujarlo. Un dibujante que capta a la perfección el tono salvaje y brutal de esta nueva versión del Caballero Oscuro, y que además es ideal para esas escenas de acción tan exageradamente espectaculares de las que hace gala este tebeo. Todo apoyado, claro está, en el perfecto coloreado de Frank Martin, quien también ha demostrado ser uno de los mejores coloristas de la industria desde hace muchísimos años. En este aspecto, este primer número de Absolute Batman no decepciona y nos entrega uno de los cómics de DC mejor dibujados del año. ¿Orejas Batarang? ¿un Batman que pelea con un hacha? ¡Dragotta y Martin dan en el clavo de la absurdez, y mola mil!
En cuanto al guion de Scott Snyder, lo cierto es que nos encontramos ante un primer número bastante solvente y autocontenido, en el sentido de que funciona perfectamente como una primera lectura introductoria. Es un cómic que se siente como debería sentirse una historia de Batman, pero con un par de giros que lo cambian radicalmente; algo que resulta lógico y necesario teniendo en cuenta que esto es un nuevo universo alternativo, no el Universo DC tradicional. Me imagino que estos cambios darán mucho de qué hablar en futuros episodios de la serie, pero de momento solamente son planteamientos base, sin desarrollar a fondo. Aun así, este primer número me ha gustado mucho y me ha dejado con muchísimas ganas de leer los siguientes números. ¿Y qué más se le puede pedir a un cómic mensual en grapa? Yo creo que nada.
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