[Reseña] Mushoku Tensei: Reencarnación desde cero Vol.2, de Yuka Fujikawa

Ficha Técnica:

Edición original: Mushoku Tensei. 2 (MEDIA FACTORY, 2014)

Edición Nacional/España: Mushoku Tensei. 2 (Panini Manga, 2021)

Guión:  Rifujin na Magonote

Formato: Tapa Blanda. 168 páginas. 8,50 €

Parece mentira que uno de los mayores exponentes en los isekai, género que siempre he odiado, haya logrado que me enganche hasta para llegar al punto de hacerme con el segundo tomo de la colección. Y es que Mushoku Tensei, si algo tiene, es capacidad para ser una obra adictiva y gracias no solo a su propuesta, sino que también a su narrativa relativamente calmada y reflexiva.

La historia continua después de la brutal derrota de Rudeus ante Paul, quién acaba metiéndole en un carruaje después de noquearle con su espada de madera. Allí conoce a Ghislaine, una mujer-bestia y anterior compañera de aventuras de sus padres, que le informa sobre la situación: Paul se ha encargado de mandar lejos a Rudi durante 5 años para que trabaje con unos familiares, y así podrá pagarse la matrícula de la academia de magia. Está claro que Paul, como buen padre que es, (aunque no muy buen esposo), se ha encargado de separar a su hijo de Sylphie, porque estaban desarrollando una dependencia emocional del uno al otro, que a la larga afectaría negativamente a los dos.

Rudi y su nueva compañera de trabajo acaban llegando finalmente a la ciudadela de Roa. En la mansión de los gobernadores de ese lugar es donde trabajará Rudeus durante los próximos 5 años, como tutor de la señorita Eris, la nieta del gobernador.

Eris no es que sea la niña más disciplinada y educada: con lo malcriada que está por culpa de su abuelito, ha desarrollado un orgullo y ego enormes. Es gritona, agresiva y compulsiva, así que Rudi se las tendrá que apañar y crear mil chanchullos para demostrarle a la cría que debe educarse más en cuanto a hechicería se refiere.

Va pasando el tiempo, y parece que poco a poco, gracias a las habilidades que él mismo ha demostrado, Eris se abre más a las enseñanzas de Rudi. No sin sus épocas de rebeldía, que se acaban subsanando con un día de paseo por el mercado de la ciudadela.

El dibujo, como ya dije en la primera reseña de la serie, se siente como un verdadero anime. El estilo artístico tan cuco, junto a su dinamismo en escenas de la vida cotidiana, hacen maravillas para los ojos, siendo francos. De todas formas, no dejo de pensar en que el estilo artístico no se siente "artesano": parece literalmente sacado del anime, para bien o para mal.

El tomo termina con el inicio del décimo aniversario de la niña, después de practicar danza junto a Rudeus. No es un final tan impactante como lo fue el del primer volumen, pero entiendo que eso fue el tirón inicial de la historia y que justo ahora se encuentra en un momento transitorio.

LO BUENO

- El argumento continúa desarrollándose poco a poco, a fuego lento. 

- Las ilustraciones parecen sacadas de una serie animada. 

- Todo lo que rodea a la familia Boreas.

LO MALO

- El estilo artístico se me hace poco creativo y nada artesanal. 

- Algunos chistes verdes se pueden hacer molestos. 

- Este tomo se me hace mas aburrido que el primero, es lo que tiene haber cambiado de forma tan         drástica el entorno del protagonista.